
escrituras , pensamientos, y reflexiones de una mina común...
sentimientos..
02.04.2014 22:10
"Cuentan que una vez se reunieron todos los sentimientos y cualidades del hombre en algún
lugar de la Tierra. Cuando el aburrimiento ya había bostezado por tercera vez, la locura, como
siempre tan loca, propuso: Vamos a jugar a las escondidas? -
La intriga levantó la ceja intrigada y la curiosidad sin poder contenerse preguntó: A las
escondidas? Y cómo es eso? Es un juego - explicó la locura - en el que yo me tapo la cara y
comienzo a contar desde cero hasta un millón mientras ustedes se esconden; al primero que
encuentre ocupara mi lugar para continuar el juego
El entusiasmo bailó, secundado por la euforia, la alegría dio tantos saltos que terminó por
convencer a la duda, incluso la apatía, a la que nunca le interesaba nada.
La soberbia opino que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no
hubiese sido de ella) y la cobardía ... prefirió no arriesgarse. Uno, dos, tres, cuatro... comenzó a
contar la locura. La primera en esconderse fue la pereza que se dejo caer detrás de la primera
piedra del camino; la fe subió hasta el cielo y la envidia se escondía tras la sombra del triunfo,
que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol mas alto.
La generosidad casi ni alcanzaba a esconderse, pues cada sitio que encontraba le parecía
maravilloso para sus amigos: ¿Si era un lago cristalino? Ideal para la belleza... ¿Si era la rendija
de un árbol? Ideal para la timidez... ¿Si era una ráfaga de viento? Magnífico para la libertad; así
terminó por ocultarse en un rayito de sol.
El egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo, pero
solo para él. La mentira se escondió en el fondo de los océanos (mentira, se escondió detrás del
arco iris); y la pasión y el deseo, en el centro de los volcanes.
El olvido... no me acuerdo donde se escondió, pero eso no importa. Cuando la locura estaba en
el 999.999, el amor no había encontrado sitio donde esconderse pues estaban todos ocupados...
hasta que diviso una rosa y enternecido decidió esconderse entre sus pétalos. Un millón !! -
Contó la locura y comenzó a buscar. La primera en aparecer fue la pereza, a solo tres pasos
detrás de una piedra. Después se escuchó a la fe discutiendo con Dios en el cielo sobre zoología.
Sintió vibrar a la pasión y al deseo en los volcanes. En un descuido lo encontró no tuvo ni que
buscarlo, el solito salió de su escondite que resultó ser un nido de avispas. De tanto caminar,
sintió sed y al acercarse al lago descubrió la belleza.
Con la duda resultó más fácil todavía, pues la encontró sentada sobre la cerca sin decidir aún de
que lado esconderse. Así fue encontrando a todos, al talento sobre la hierba fresca, a la angustia
en una cueva oscura, a la mentira detrás del arco iris (mentira, estaba en el fondo de los océanos)
y hasta el olvido que ya se había olvidado que estaba jugando a las escondidas. Solo el amor no
aparecía por ningún lado.
La locura buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo del planeta, en la cima de las
montañas...
Cuando estaba por darse por vencido, divisó un rosal. Tomo una horquilla y comenzó a mover
sus ramas, cuando de pronto se escucho un doloroso grito. Las espinas habían herido al amor en
los ojos. La locura no sabia que hacer para disculparse. Lloró, rogó, imploró, pidió perdón y
hasta ofreció ser su lazarillo. Es por eso que desde entonces, desde la primera vez que se jugó a
las escondidas, el amor es ciego y la locura siempre lo acompaña..."